PUAM y moratoria previsional: herramientas para quienes no llegan a jubilarse
En su habitual espacio informativo, la abogada previsionalista Dra. Rita Felizia Meteña (matrícula profesional 10.256) brindó detalles clave sobre la situación actual de jubilados y personas próximas a iniciar trámites de jubilación. El foco estuvo puesto en la moratoria previsional vigente y la PUAM (Pensión Universal para el Adulto Mayor), dos opciones fundamentales para quienes no alcanzan los 30 años de aportes exigidos por ley.
Actualmente, el valor de la cuota mínima para regularizar aportes ronda los $32.300. Si bien la nueva ley fue aprobada por el Congreso, aún existe la posibilidad de un veto presidencial, lo que genera incertidumbre. En caso de que no se pueda acceder a la jubilación por moratoria, la alternativa es la PUAM, que otorga el 80 % del haber mínimo y brinda cobertura médica a través de PAMI.
“La PUAM es un beneficio que muchas veces funciona como un premio consuelo para quienes no pudieron acceder a una jubilación plena. Pero muchas veces esas personas no dejaron de aportar por decisión propia, sino por la falta de aportes de sus empleadores, especialmente antes de 1994”, explicó la doctora Meteña.
Además, ofreció consejos útiles para quienes están por iniciar su trámite:
Cada año de exceso en edad jubilatoria cuenta como un año de aporte.
Por cada año que supere los 30 años de aportes, el haber jubilatorio aumenta un 1 %, hasta un máximo de 45 años.
📍 La Dra. Rita Felizia Meteña atiende en su estudio jurídico en Las Heras 502, Río Tercero, los lunes, martes y miércoles de 9 a 13 y de 15:30 a 17:30, con atención por turno previo.
📞 Contacto: 3571 31 02 21
Deberás caer en discusiones con ciertas personas sin escrúpulos de tu ambiente hogareño. No pierdas los estribos. Jornada apropiada para pasar momentos de cercanía junto a tu pareja, sea en la comodidad del hogar o fuera de este. Llegarás a la conclusión de que ya no estás cómodo haciendo tu trabajo. Es el momento de empezar a buscar nuevos horizontes.Sugerencia: Las limitaciones del cuerpo están puramente en la mente. Si piensas que puedes hacer algo y lo crees, entonces lo harás. Confía en ti.