Domingo
20 de Abril de 2025
25 de febrero de 2025
El rastrillaje continúa con miembros de la Policía de Córdoba, Bomberos, el Ejército y la Policía Federal. El fiscal general Juan Manuel Delgado reveló que diez aparatos sospechosos fueron secuestrados por las autoridades, junto con tres camionetas
Infobae pudo saber de fuentes del caso que la apertura y análisis de los celulares comenzó ayer lunes en un laboratorio de la Policía Judicial del Ministerio Público Fiscal cordobés. Lo que digan estos teléfonos y la prisa con la que se obtenga un resultado podrá ser clave.
Por lo pronto, no hay detenidos, en una causa manejada bajo un estricto secreto de sumario. Las identidades de los dueños de esas camionetas y teléfonos son mantenidas en reserva y no trascendieron aún, o los motivos de los allanamientos que llevaron a los secuestros.Un vecino del lugar fue el primero en mencionar la presencia de la Amarok con vidrios polarizados que, supuestamente, pasó despacio por el predio donde residía Lian con su familia, cortadores de ladrillos. “Seguro lo debe haber agarrado a él”, acusó el lugareño, aunque este dato no ha sido confirmado como un indicio por las autoridades.El padre de Lian, Elías Flores, habló ayer con Telenoche Córdoba y aseguró que no recibió amenazas.“Cara a cara, nadie me dijo nada, nadie me dijo ‘te voy a hacer esto’ o ‘tenés esto’, nada que me hayan amenazado. Pienso que había una chata que había entrado al lugar ese y yo lo conozco bien a mi hijo, no puede irse más de 200 o 100 metros más lejos porque había semejante calor”, declaró. Luego, se limitó a aclarar: “No sé si será una venganza”. Por lo pronto, no habló de posibles enemigos.